Amor Extraordinario - Respondiendo apropiadamente a un Rey que murió

April 5, 2020 Lucas 23:33-49

Amor extraordinario - Respondiendo apropiadamente a un Rey que murió

5 de abril del 2020 Lucas 23:33-49

Hace poco más de 17 años, mi padre falleció muy inesperadamente.
Mi padre era un hombre muy trabajador. Sus padres eran de South West Virginia y habían experimentado altibajos financieros debido a la depresión y la naturaleza cíclica de la minería del carbón y el gas.
Mi padre asistió a la universidad durante 2 años, pero no pudo terminar debido a que los recursos eran limitados, por lo que se unió al ejército y finalmente fue asignado a Europa.
Durante ese tiempo, mis abuelos se trasladaron de Virginia a Gary, Indiana, para poder trabajar en las fábricas de acero.
El tenía 40 años cuando hicieron ese movimiento. En ese momento ni siquiera tenían un carro. Mientras pasan los años siento más respeto por un hombre que se mudó a una parte completamente diferente del país, y cambió de forma de vida, simplemente para poner comida en la mesa para su familia.
Cuando el servicio militar de mi padre terminó, se mudó a Gary y comenzó a trabajar como contador en US Steel.
Esto habría sido a finales de 1950, cuando la industria del acero estaba en auge. El también estaba tratando de alcanzar su título universitario, estudiando en las tardes y los fines de semana, así que su horario era muy apretado.
También fue extremadamente frugal en sus gastos. Esto era entendible, habiendo teniendo una crianza con tantas limitaciones.

Pero una semana cada año, él, un primo y un amigo cercano del ejército se iban a pescar juntos en Canadá.
Uno de esos tres hombres sigue vivo, Jack Cannon. Jack tiene algunas películas que tomaron durante esos días, y que son asombrosas en términos del tamaño y la cantidad de peces que pescaron.

Pero mucho más importante, ese era un tiempo que compartían como amigos, cuando podían alejarse de todas las presiones de la vida y disfrutar del compañerismo juntos.
Lo que me sorprendió fue que cuando cumplí los 10 años, me preguntaron si me gustaría ir con ellos. Estar allí en el mismo medio de todos sería un reto, pero de cualquier modo me dejaron allí.

Traté de comportarme, pero estoy seguro de que fui una molestia en todo tipo de formas.
Mientras más crecía, más me impactaba el sacrificio financiero que mis padres hicieron para incluirme en esos viajes.

Mi padre quería que fuera parte del grupo y estaba dispuesto a pagar el precio necesario para que eso sucediera.
Ahora, pienso que algunos que me escuchan podrían decir, “sabes, mi papá también era así”. Tal vez no con un viaje de pesca, pero de otras maneras. Dale gracias al Señor si fuiste bendecido de esa manera.

Pero me imagino que algunos, si no muchos, dirían, "muchacho, ojalá hubiera tenido un padre así".
Aquí están las buenas noticias esta mañana, así como lo escribió el apóstol Pedro, 1 Pedro 3:18 - Porque Cristo también murió por los pecados de una vez por todas, los justos por los injustos, para que nos trajera a Dios.

El Dios del cielo y de la tierra, el Padre celestial, quiere que estéis con él, y está dispuesto a hacer el sacrificio necesario para hacerlo posible.

Con eso en mente, permítanme invitarlos a abrir su Biblia en Lucas capítulo 23 esta mañana.
Estamos haciendo un alto en nuestro estudio verso por verso del libro de Romanos durante un par de semanas. Este era nuestro plan incluso antes del brote del virus y hemos decidido que, con toda la agitación en nuestras vidas en este momento, que sería prudente mantener un cierto sentido de constancia en nuestra vida eclesiástica.

Una adoración apasionada, y luego un estudio de la Palabra de Dios como lo hacemos normalmente, sigue siendo nuestro enfoque
Si Dios quiere, volveremos a Romanos el 19 de abril.
Pero hoy queremos estudiar lo que Lucas registra sobre la crucifixión de Cristo. Es increíble lo que Lucas dice, y, sobre todo, lo que no dice.

Si es la voluntad del Señor, nos reuniremos y usaremos este mismo formato el viernes a las 7:00 de la noche.

Habíamos planificado por primera vez este año un servicio especial de Viernes Santo. Vamos a seguir adelante con ese plan, y de hecho, puede ser más relevante y útil que nunca este año como resultado de COVID-19.
Les animo a que tengan pan y jugo de uvas disponibles esa noche del viernes Santo porque, aunque normalmente no lo haríamos de esta manera, como parte de ese servicio planeamos celebrar juntos la mesa del Señor, electrónicamente.
De hecho, cuanto más pienso en esa experiencia en este contexto en particular, más me convence que esto nos apunta a verdades teológicas importantes sobre la Pascua. Saben, no estoy seguro de que las hubiéramos entendido de alguna otra manera.
Entonces estamos planeando un magnifico servicio de Pascua, aunque probablemente será la Pascua más inusual que hayamos celebrado juntos, porque

será electrónicamente. Pero si eso es lo que tenemos que hacer para obedecer a nuestras autoridades civiles, para servir a nuestros trabajadores de la salud, a las personas mayores de edad, a los que tienen una salud débil, están comprometidos inmunológicamente a nuestro alrededor, y a las personas que podrían tener complicaciones graves debido a este virus, estamos más que dispuestos a hacer es el sacrificio que haya quehacer.

Ahora, cuando ponemos nuestra atención a Lucas 23, no hay duda de que el enfoque está en cuántos en la historia estaban rechazando específicamente la idea de que Jesucristo estaba calificado para ser su Rey.
El comentarista John MacArthur lo explica así:
La cruz, con su injusticia, crueldad y sufrimiento, era cualquier cosa, menos una comedia. Pero las personas que participaron en los eventos de aquel día en el Calvario lo convirtieron en una. Para ellos era un evento ridículo, una farsa, una broma, cuyo punto era Jesús. Pensaron que la idea de que El era el Rey de los Judíos era para reírse. Ellos se mofaban, se burlaban, y le lanzaban improperios.
Ellos diseñaron y escenificaron la ejecución de Jesús para que fuera una sátira. Lo entronizaron en una cruz como un rey. En Su cabeza colocaron una corona, no de oro, sino de espinas, que hacía que la sangre rodara por Su rostro. En esta comedia diabólica, crucificaron a un ladrón a la derecha de Jesús y otro a su izquierda. Esta era una parodia. Ellos fueron como los dos cortesanos más respetados de un rey, el segundo y el tercero más honorable en su corte. Luego le ofrecieron vino burlonamente, como si cumplieran con su deber de servir a las necesidades del monarca.
Poco antes, en la sala de juicios de Pilato, le habían puesto un áspero manto de un soldado como si fuera una túnica real, le colocaron una caña como cetro real en su mano, y lo aclamaron burlonamente como rey. Luego tomaron la caña y lo golpearon en la cabeza con ella y le escupieron para mostrar su absoluto desprecio a la idea de su realeza.
Para el pueblo judío, la idea de un Mesías crucificado era absurda, ridícula e incomprensible. Esperaban que el Mesías fuera un rey conquistador, que derrotaría a los enemigos de Israel y establecería su reino. Buscaban una coronación, no una crucifixión; esperaban a un mesías que matara a sus enemigos, no a uno que fuera asesinado por su propia gente. La cruz era una insensatez para ellos (1 Corintios 1:18), un enorme tropiezo que no pudieron superar (v. 23) (John MacArthur, Romanos 1-8, p. 376).

Estamos hablando esta mañana acerca del Amor Extraordinario - Respondiendo Apropiadamente a un Rey que murió

Ahora leamos en Lucas 23:33-49

Cuando llegaron al lugar llamado «La Calavera», crucificaron allí a Jesús y a los malhechores, uno a la derecha y otro a la izquierda. Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen. Y echaron suertes, repartiéndose entre sí sus vestidos. Y el pueblo estaba allí mirando; y aun los gobernantes se mofaban de Él, diciendo: A otros salvó; que se salve a sí mismo si este es el Cristo de Dios, su Escogido. Los soldados también se burlaban de Él, acercándose y ofreciéndole vinagre, y diciendo: Si tú eres el Rey de los judíos, sálvate a ti mismo. Había también una inscripción sobre Él, que decía: ESTE ES EL REY DE LOS JUDÍOS.

Y uno de los malhechores que estaban colgados allí le lanzaba insultos, diciendo: ¿No eres tú el Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a nosotros! Pero el otro le contestó, y reprendiéndole, dijo: ¿Ni siquiera temes tú a Dios a pesar de que estás bajo la misma condena? Y nosotros a la verdad, justamente, porque recibimos lo que merecemos por nuestros hechos; pero este nada malo ha hecho. Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino. Entonces Él le dijo: En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso.
Era ya como la hora sexta, cuando descendieron tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena al eclipsarse el sol. El velo del templo se rasgó en dos. Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiró. Cuando el centurión vio lo que había sucedido, glorificaba a Dios, diciendo: Ciertamente, este hombre era
inocente. Y cuando todas las multitudes que se habían reunido
para presenciar este espectáculo, al observar lo que había acontecido, se volvieron golpeándose el pecho. Pero todos sus conocidos y las mujeres que le habían acompañado desde Galilea, estaban a cierta distancia viendo estas cosas.

Examinemos estos versículos de cerca para encontrar tres respuestas apropiadas a la muerte de Cristo.
I. Ser solemnes ante el rechazo del Mesías Sufrido.
En este punto de la historia, todas las pruebas y las golpizas se han completado. Es probable que, a estas alturas, Jesús ni siquiera pudiera ser reconocido. En su artículo, “Crucifixión, El sufrimiento físico de Jesús”, Jeremy Myers dice: "La mayoría de los artistas ni siquiera se acercan a describir cómo lucia Jesús

después de toda esta tortura. Probablemente era la cosa más inhumana que jamás hayas visto. El profeta Isaías escribió sobre el Mesías:
"De la manera que muchos se asombraron de ti, pueblo mío,
así fue desfigurada su apariencia más que la de cualquier hombre,

y su aspecto más que el de los hijos de los hombres..." (Isa 52:14) Jeremy Myers, Crucifixión — El sufrimiento físico de Jesús) (cita de Myers)

Si desea estudiar esto con más detalle de lo que nuestro tiempo permite hoy, les animo a utilizar la Armonía de los Evangelios . Este libro está disponibles en copia impresa o como recurso electrónico.
Esto es muy útil porque establece la información de los cuatro evangelios en orden cronológico. También hay muchos comentarios que discuten los detalles de la crucifixión.

Como dije en la introducción, es digno mencionar tanto lo que se dice, como lo que no se dice.
A. De como es crucificado como un criminal común
Lucas dice esto con tan pocas palabras como te puedas imaginar.

Lucas 23:33, “Cuando llegaron al lugar llamado La Calavera, allí lo crucificaron a él y a dos criminales, uno a la derecha y el otro a la izquierda. El explica el lugar “Gólgota” o Calvario, o un lugar llamado "la Calavera"
Nadie sabe con certeza por qué este lugar estaba fuera de la ciudad y se llamaba así. Tal vez fue en una colina para que todos los ciudadanos pudieran ver lo que el gobierno romano era capaz de hacer con la gente que querían castigar o tal vez porque los cráneos de los que habían sido previamente crucificados estaban allí tirados alrededor.
También explica el método – crucifixión. Pero a pesar de que Lucas era médico, no dice nada sobre los aspectos físicos de lo que estaba experimentando Jesús.
Si explica que dos criminales estaban a ambos lados. Los evangelios de Mateo y Marcos explican que estos hombres eran ladrones y sediciosos.
Todo esto corresponde asombrosamente y perfectamente con las profecías de Isaías 53:12 – “y fue contado con los transgresores; sin embargo, él mismo llevó el pecado de muchos, e intercedió por los transgresores.”

Ahora, todos podríamos preguntarnos, ¿por qué esa economía de palabras? Los historiadores han escrito sobre el proceso de crucifixión y también lo han hecho los médicos. El proceso era cruel y horrible. ¿por qué los escritores del Evangelio no habrían enfatizado eso más? Por supuesto que no lo sabemos con seguridad.

Pero hay 3 posibles razones:
1. Los lectores originales ya estaban íntimamente familiarizados con la crucifixión. El sólo mencionar la palabra crucificado les habría espantado.
2. El dolor físico no era el foco. El punto central habría sido lo que se estaba logrando en la dimensión espiritual con este enorme sacrificio. Esto es lo que enfatizan las palabras antes y después del versículo que acabamos de mencionar en Isaías 53:12 “Se derramó hasta la muerte, y fue contado con los transgresores; sin embargo, él mismo llevó el pecado de muchos.”
3. También es posible que el Señor no quería que respondiéramos a estos acontecimientos de una manera puramente emocional.
En última instancia, tú y yo tenemos que decidir cómo vamos a responder a un Rey que murió. Pero el enfoque tiene que ser, no que haya sido una muerte horrible, sino que fue una muerte sustituta.

Ahora, ¿quién más estaba presente en esta parte de la historia?

B. Mientras estaba rodeado de personas indiferentes y centradas en sí mismas Lucas 23:34 “Y echaron suertes, repartieron entre sí sus vestidos.”
Aquí está el Mesías prometido, el Siervo Sufrido de Dios, el Rey, muriendo por los pecados del hombre. Y algunos de los soldados están más interesados en quién se iba a quedar con su manto.

Los miembros más viejos de nuestra congregación recordarán el sermón del Pastor Goode sobre este versículo, donde los soldados estaban "apostando al pie de la cruz”, mientras supervisaban la muerte cruel de un Rey inocente.

C. Estuvo expuesto a mofa y burlas
Lucas 23:35–37 “Y el pueblo se quedó a la espera, mirando. E incluso los gobernantes se burlaban de El, diciendo: "Salvó a los demás; Que se salve a sí mismo si este es el Cristo de Dios, Su Elegido." Los soldados también se burlaron de El, acercándose a El, ofreciéndole vino amargo y diciendo: "¡Si eres el rey de los judíos, sálvate!"
Su mensaje era claro, “¡qué Rey tan patético! ¡Nunca querríamos un Mesías que sufriera así!”
Parte de lo que es sorprendente es que esto es exactamente lo que la Escritura predijo cientos de años antes de que ocurriera:
Isaías 50:6 “Di mis espaldas a los que me herían, y mis mejillas a los
que me arrancaban la barba; no escondí mi rostro de injurias y esputos.”
O bien las personas involucradas eran ignorantes a la Escritura o completamente indiferentes a ella.
También había pasajes como este gran Salmo Mesiánico:

Salmo 22:6–8 “Pero yo soy gusano, y no hombre; oprobio de los hombres, y despreciado del pueblo.
Todos los que me ven, de mí se burlan;
hacen muecas con los labios, menean la cabeza, diciendo: Que se encomiende al Señor; que Él lo libre,

que Él lo rescate, puesto que en Él se deleita."

Hay que resaltar que aquellos que tenía acceso a la Escritura no estaban conectando los puntos tan rápidamente.
Por lo que incluso discutieron sobre el título colocado encima de su cabeza ensangrentada. Lucas simplemente escribe:

Lucas 23:38 “Ahora, también había una inscripción encima de él, "Este es el rey de los judíos.”
Pero los otros escritores del Evangelio explican que los líderes religiosos querían que Pilato lo cambiara para decir, “Dijo ser el rey de los judíos”. ¿Recuerdas la respuesta de Pilato?

Juan 19:22 “Pilato respondió: "Lo que he escrito lo he escrito".”

Ese puede ser el acto más valiente que Pilato haya realizado, y las palabras más precisas que haya escrito.
Ahora, para que no seamos demasiado críticos con las diversas personas y grupos allí presentes ¿podemos hacernos una pregunta difícil?

D. ¿Nosotros hubiéramos sido diferentes?

¿alguna vez hemos tenido dificultad en hacer de Jesús nuestro legítimo Rey, especialmente cuando “Sus pensamientos no son nuestros pensamientos, y Sus caminos no son nuestros caminos?”
No me gusta lo que Jesús dice sobre la forma en que uso mi lengua, así que no va a ser mi rey en esa área de mi vida. Seré mi propio rey.

No me gusta lo que Jesús dice sobre mis relaciones, mi sexualidad y el matrimonio, así que seré mi propio rey.
No me gusta lo que Jesús dice sobre la humildad, la integridad y la honestidad, así que seré mi propio rey.
Abrazar a un Mesías sufriente no nos sale espontánea o automáticamente. Seguir a alguien que es digno de ser nuestro Señor tampoco es fácil ni automático.
¿Puedo preguntar esto en esta mañana, encuentran este ejemplo del rechazo del Salvador sufriente de Dios solemne?
Estoy consciente de que hay muchas cosas por las que debiéramos estar solemnes en nuestro mundo en este momento. Pero es notable que cuando Lucas cuenta este aspecto de la historia de Pascua nos hace ver que es el rechazo lo que realmente se enfatiza. La crucifixión eso sólo un fondo oscuro, por eso no podemos:

II. Dejarnos sorprender por la compasión del Mesías Sufriente.

Cuando juntamos los cuatro evangelios, aprendemos que Jesús dijo siete "palabras desde la cruz". Lucas registra tres de ellas, que muestran a Jesús, así como se ve, sufriendo.
A. ¿Quién se centra en el perdón?

Lucas 23:34 “Y Jesús decía: Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen.”
Un punto importante sobre todas estas declaraciones es ver que, así es como muere un Rey verdadero: su majestad, su desprendimiento, y su humildad se exhiben de forma perfecta.
Esto es lo que Isaías quiso decir en su profecía del siervo sufriente.
Isaías 53:12 “Se derramó hasta la muerte, y fue contado con los transgresores; sin embargo, él mismo llevó el pecado de muchos, e intercedió por los transgresores.”
Mientras que muchos en esta historia rechazaron al Rey sufriente, debemos sorprendernos por Su compasión y gracia.
Por cierto, ¿se llegó a cumplir su oración?
La petición de Cristo fue en cierto sentido una oración general, revelando que no hay pecado contra el Hijo de Dios tan severo que no pueda ser perdonado a los que se arrepienten (Mateo 12:31–32). En el Día de Pentecostés, tres mil judíos en Jerusalén se convirtieron a Cristo y se bautizaron y la iglesia nació. En pocas semanas, otras cinco mil o más personas en Jerusalén abrazaron la fe de Jesucristo. Seguramente muchos de los que vinieron a Cristo en esas semanas después de la resurrección estaban allí en la multitud ese día en el Calvario. La iglesia nació en gran medida de los que estaban allí y se burlaron del Hijo de Dios en respuesta a esta oración (John MacArthur, Romanos 1-8, págs.384-85)
Luego viene esta increíble conversación con uno de los dos ladrones:
Lucas 23:42 “Y decía: Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino"
Tal vez este hombre escuchó lo que Jesús acababa de orar al padre acerca del perdón.
Y finalmente tenemos a alguien dispuesto a aceptar al Rey en los términos de Dios, no en los suyos propios. “Y él estaba diciendo: "¡Jesús, recuérdate de mí cuando vengas a tu reino” ¿y qué dijo Cristo?

B. Quién está enfocado en la redención
Lucas 23:43 “Entonces Él le dijo: En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso”

Sólo había una manera en que esto iba a ser posible, si Jesús completaba lo que estaba haciendo en ese mismo momento.
Por cierto, ¡es increíble que Jesús estuviera hablando!
La crucifixión es una muerte por asfixia. La persona pasaría por el dolor agónico de tratar de enderezarse halando de sus muñecas y apoyándose en sus pies para recuperar algo de aire.

Lo último que harías es desperdiciar el aliento en algo que no fuera importante. Lo cual nos dice que, para nuestro Salvador compasivo, asegurarle a un criminal arrepentido su destino eterno no fue un desperdicio de aire.
1 Pedro 3:18 “Porque también Cristo murió por los pecados una sola vez, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu”

Amigo, te repito: así es como muere un Rey verdadero, deseando que un ladrón arrepentido esté con El, ese mismo día, en el Paraíso.

Mi padre y yo incluso hicimos algunos de esos viajes de pesca después de casarme. En uno de estos viajes en particular ya vivía en Nueva Jersey. Debido a que nuestros amigos venían de Virginia, y que mi padre venía de Indiana, y hacia donde nos dirigíamos era Canadá, decidimos reunirnos en un hotel en Toledo, Ohio.

Bueno, tuve que trabajar el día anterior, así que sabía que no llegaría si no hasta las 3 o 4 de la madrugada.
Esto fue mucho antes de los teléfonos celulares y el correo electrónico, así que coordinamos de antemano dónde nos encontraríamos.

En la mente de mi padre eso significaba que, una vez que llegara, yo subiría a su habitación y los despertaría. Por mi parte yo asumí que tiraría el asiento del coche hacia atrás y dormiría allí, para no molestarlos.
Temprano esa mañana cuando salía el sol, mi papá y su amigo Jack, estuvieron inquietos buscándome por el estacionamiento. Se les notó en la cara la sensación de alivio increíble que sintieron al saber que yo estaba a salvo.

Amigos, ese es el tipo de Salvador que adoramos. Alguien que con su último aliento de vida le diría a un ladrón moribundo, pero arrepentido

“En verdad te digo: hoy estarás conmigo en el paraíso." Lucas 23:43

Entonces sucedió algo más. La oscuridad cayo sobre la tierra. Sabemos por los otros evangelios que esto sucedió cuando Dios el Padre le dio la espalda a Su propio Hijo, mientras llevaba el peso y la pena de nuestro pecado.
Ese es un punto muy importante: en última instancia ni los líderes religiosos, ni Pilato, ni los soldados mataron a Jesús.

Cuando empezamos a hacer el drama de La Pasión de Cristo en nuestra iglesia, un rabino judío me contactó y me pidió que dejara de hacerlos porque llevaría a la audiencia al antisemitismo. En su mente, el drama de la pasión llevaría la gente a culpar los judíos por la muerte de Cristo.

Yo le expliqué que, si bien no negaría que eso pudo haber ocurrido en otro tiempo y en otros lugares, en este momento no sería esa la respuesta de las personas.
Un cristiano no culparía a los líderes judíos, o a los líderes romanos, ni a los soldados, ni a nadie más por la muerte de Cristo. Esto, por al menos 2 razones: Creemos que Jesús estaba muriendo por nuestro pecado. Nosotros matamos a Jesús. No sólo necesitábamos un Rey, necesitábamos un Mesías dispuesto a sufrir por nosotros.

Pero hay una pregunta aún más profunda que esa, y que llega al corazón mismo del Evangelio: amigo, ¿Quien mató a Jesús? La respuesta es: el Padre Celestial.
En la medida en que usted entiende ese punto, en ese mismo grado entiendes la esencia del Evangelio.

Dios es Santo, y Su justa ira tenía que ser satisfecha o los pecadores como este ladrón nunca podrían haber sido redimidos; no realmente.
Por eso leemos estas increíbles palabras en Isaías:
Isaías 53:10 “Pero quiso el Señor

quebrantarle, sometiéndole a padecimiento.
Cuando Él se entregue a sí mismo como ofrenda de expiación”
Usando la terminología que hemos aprendido en nuestro estudio del libro de Romanos, esto fue “para demostrar en este tiempo su justicia, a fin de que Él sea justo y sea el que justifica al que tiene fe en Jesús.” Romanos 3:26
Esta oscuridad penetrante que duró tres horas en pleno mediodía, no fue provocada por Satanás, sino por Dios mismo. Esto, añadido al terremoto y los fenómenos explicados en los otros evangelios, cambiaron el tono de las cosas. Ya dejó de ser un momento para burlarse y mofarse. Luego Lucas explica
Lucas 23:45 “al eclipsarse el sol. El velo del templo se rasgó en dos.”
Eso mis amigos, es la mejor noticia que puedas imaginar. Ahora es posible a través de la redención, la propiciación y la justificación ser vestidos con la justicia de Cristo, al igual que este ladrón arrepentido, y ser llevados a Dios.
Por eso, lo siguiente que Lucas registra son las últimas palabras de Cristo

C. ¿En quién está enfocado el final?
Lucas 23:46 “Y Jesús, clamando a gran voz, dijo: Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Y habiendo dicho esto, expiró.”
Así es como muere un Rey, es como muere el siervo majestuoso, real y sufriente profetizado por Isaías.
Así, El completa la tarea que nadie más puede cumplir.

Amigos, ¿dónde nos deja esto?

III. Seamos misioneros, a medida que ves a Dios atraer gente a sí mismo.

Probablemente el versículo más conocido en toda la Palabra de Dios es

Juan 3:16 “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, para que todo aquel que cree en Él, no se pierda, mas tenga vida eterna” ¿No es cierto que lo podemos ver a través de este pasaje?

¿quiénes son algunos de aquellos a quien Lucas no incluye en “todo aquel”?

A. El otro ladrón

Lucas nos dice que

“Y uno de los malhechores que estaban colgados allí le lanzaba insultos, diciendo: ¿No eres tú el Cristo? ¡Sálvate a ti mismo y a nosotros! " Lucas 23:39
Tristemente, esa era otra persona que no estaba satisfecha de que Jesús era el tipo de rey que esperaba, o en este caso, que exigía en ese momento.

Pero lo que el otro ladrón dice es prueba del poder del Evangelio:

“Pero el otro le contestó, y reprendiéndole, dijo: ¿Ni siquiera temes tú a Dios a pesar de que estás bajo la misma condena? Y nosotros a la verdad, justamente, porque recibimos lo que merecemos por nuestros hechos; pero este nada malo ha hecho". Lucas 23:40–41

Amigos, eso es arrepentimiento. El está reconociendo la dura verdad que mencionamos hace un momento: ¿quién mató a Jesús? En un sentido muy real, yo lo hice. Y sabes algo más, y tú también.
Este hombre usó su último aliento moribundo para gritar
“Jesús, acuérdate de mí cuando vengas en tu reino!" Lucas 23:42

Sin embargo, por otro lado, también Lucas nos muestra alguien que si está incluido en “todo aquel”.

B. Un centurión

¿Cuánto tiempo pasó entre el momento en que Jesús murió y que la gente comenzó a ser "traída a Dios" tal como Pedro afirmó? Unos cuantos segundos.
Lucas 23:47 “Cuando el centurión vio lo que había sucedido, glorificaba a Dios, diciendo: Ciertamente, este hombre era inocente”

¡Estamos hablando de una conversión dramática! ¿Un soldado endurecido alabando a Dios delante de sus subalternos y de todos aquellos quienes se burlaron de Jesús?
Amigo, ¿Has respondido al mensaje del Salvador sufriente de Dios de esta manera?

La posición de que no tendrás este tipo de rey gobernando sobre ti puede adoptar todo tipo de formas. Muchas personas en todo nuestro mundo han estado viviendo de esa manera de una manera o de otra.
Lamentablemente, muchos de los objetos en los que depositaron su fe y confianza ya han desaparecido en este momento.

¡Qué maravilloso ejemplo de la obra providencial y salvadora de Dios!

Lucas nos muestra, además, algunos que pudiesen estar incluido en “todo aquel”.

C. La multitud
Lucas 23:48 “Y cuando todas las multitudes que se habían reunido
para presenciar este espectáculo, al observar lo que había acontecido, se volvieron golpeándose el pecho.”
¿Usted pregunta si había allí un desborde de emociones?
Cualquiera que se hubiera burlado y ridiculizado a Cristo horas antes, ahora se golpeaba lleno de culpa y remordimiento. Esto no es necesariamente algo malo, siempre que conduzca al arrepentimiento y a la fe en Jesús.

Por último, Lucas nos muestra

D. Los seguidores de Cristo
Lucas 23:49 “Pero todos sus conocidos y las mujeres que le habían acompañado desde Galilea, estaban a cierta distancia viendo estas cosas.”
¿Por qué era tan importante para ellos estar allí?
Una respuesta es para que pudieran contárnoslo.
2 Pedro 1:16 “Porque cuando os dimos a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo, no seguimos fábulas ingeniosamente inventadas, sino que fuimos testigos oculares de su majestad.”
Y esto no era todo lo que iban a ver, porque como dijo tan elocuentemente un pastor afroamericano: lo que hemos estado estudiando esta mañana ocurrió el viernes. Pero el domingo se acercaba.
Sé que todos estos eventos que rodean al virus COVID-19 han sido muy inquietantes.
Pero si has respondido correctamente al Mesías que murió, entonces estás listo para lo que pueda venir en la vida o la muerte.